10 tips para sobresalir en la estrategia de marketing online
En los últimos años hemos podido presenciar cómo la competencia se ha elevado considerablemente en todos los mercados. Esto se debe a la capacidad de actuación mayor por parte de los oferentes, y al acceso a un mayor número de demandantes. Internet ha supuesto la creación de un mercado global, de forma que hoy día las compras y ventas se realizan a gran escala, y no en mercados domésticos, pudiendo así cualquier persona o entidad ofertar sus productos y servicios a cualquier parte del mundo, y de la misma forma, cualquier consumidor puede adquirir mercancía de cualquier otra parte por alejada que esté.
En este sentido, el marketing online juega un papel fundamental en la imagen de productos y posicionamiento en Internet, por lo que su función ha ido creciendo exponencialmente a medida que Internet ha surgido como la gran plataforma global de transacciones. Hoy día, buena parte de los agentes de cualquier índole deben tener a su disposición profesionales que cuenten con conocimientos específicos en SEO, posicionamiento web, y marketing de contenidos online, que establezcan criterios y estrategias con los que mejorar la imagen, acceso, difusión, y finalmente ventas de su producto.
Para todo lo anterior, es preciso establecer algunos consejos o estrategias para ser más competitivo y expuesto al mercado con respecto a los demás:
Tener un objetivo claro
Debemos tener claro nuestro principal objetivo, si es vender, si es incrementar visitas o simplemente establecer un objetivo de branding. Dependiendo del sentido y nuestras necesidades deberemos orientar toda nuestra estrategia a ello. Por ejemplo, si necesitamos incrementar tráfico de visitas, deberemos tener una web atractiva, con información útil, vídeos e infografía, mientras que si necesitamos vender, deberemos optar por los Newsletter, bases de datos y promociones.
Conocer a tu público
Debemos saber cuál es nuestro target, o mercado objetivo, su sexo, edad, localización, nivel de renta, gustos…
Una vez conocido y desarrolladas las respuestas a las preguntas anteriores, creamos perfiles a los que dirigirnos en relación a su idiosincrasia, e incluso elaborar perfiles diferentes transversales para los que adaptar una estrategia diseccionada.
Variar el contenido
Podemos construir contenidos e información útil o de contacto de diversas maneras. Por ejemplo, diferenciar el tipo de contenido dependiendo del objetivo concreto, elaborando post informativos en un blog, a través de pequeños casos de éxito, un foro de opinión o similar, que permita establecer relación con el usuario e interactuar con él.
La temporalidad del contenido
Por una parte debemos tener contenido atemporal, es decir, que sea siempre interesante y útil dependiendo del momento en que se consulta, de forma que nuestra web sea un embudo al que derivar cuando se consulte alguna información.
De otra forma, debemos ser activos y rápidos en estar al día en las principales novedades y actualizaciones de contenido, ya que la potencialidad de consulta y atracción del lector se basa en la posibilidad de que se enganche una vez que accede a la red.
Originalidad del contenido
Haz un contenido propio, fresco y único, de forma que no sea una mera repetición de otros portales similares, lo que no permite avanzar ni atraer a nuevos lectores. Establecer un criterio propio, que no sea aplicable o extrapolable a otras webs y que resulte una marca propia de tu portal hace que las personas puedan, además de identificar dónde se encuentran, saber qué tipo de contenidos y con qué estructura se va a encontrar.
Innovar
Como decíamos anteriormente, se trata de ser original y único, y por ello debemos innovar y actualizar las formas, aún errando, siempre se conseguirán extraer conclusiones acerca de los gustos y requerimientos de los lectores. Debemos identificar qué queremos y cuál es el fin, de forma que podamos aplicar tres estrategias diferentes y consecutivas: primero, dar información y atraer usuarios, luego determinar qué tipo de relación queremos con ellos y finalmente construir bases de datos y una relación duradera en el tiempo que nos supongan fidelizar lectores que pueden convertirse en usuarios.
Ir lo seguro: la regla 70/20/10
Si tenemos dudas acerca de qué método emplear o qué hacer, sin saber aún cuál es nuestro objetivo, la idea básica es centrar todo nuestro tiempo y recursos en aquello que mejor sabemos hacer y más rendimiento nos otorga, como por ejemplo publicar posts, redes sociales, interactuar con el usuario. A esto nos dedicaremos el 70% del tiempo.
El 20% debemos emplearlo en aquellos contenidos que más valor y crecimiento nos puedan dar, como las Newsletter, elaboración de eBooks, vídeos, infografía, concursos, promociones etc, mientras que finalmente el 10% de nuestro tiempo y recursos debebiéramos emplearlo en hacer cosas nuevas y experimentar.
El juego del marketing de contenidos consiste en, sin dejar de lado la innovación y marca propia, ir probando las cosas que funcionan bien en los demás para, poco a poco, ir moldeando una estrategia propia, analizar bien tu sector y mercado potencial, y elaborar para éstos experiencias únicas por las que puedan sentirse atraídos.
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